Señales para saber que el día del parto ha llegado.

Conforme se acerca el día del parto todas las mujeres experimentamos distintas señales que envía nuestro cuerpo para identificar si ha llegado el día de conocer a nuestro bebé. Sin embargo, podría suceder que las confundas con falsas alarmas, para que eso no suceda, te compartimos información que te ayudará a distinguir entre las señales “falsas” y las señales verdaderas.

Contracciones

Las contracciones de Braxton Hicks también llamadas "contracciones falsas" pueden presentarse a partir de la semana 29 del embarazo, son irregulares, indoloras y su duración es de 30 segundos aproximadamente. Podrás identificarlas ya que se sienten en la parte baja del abdomen y en las ingles, pueden detenerse cuando caminas, descansas o cambias de posición.

Dolor en el abdomen o en la espalda

Las contracciones de parto suelen empezar a sentirse en la espalda, la zona de los riñones y expande hasta la pelvis y las ingles. Si sientes dolor en la zona abdominal, lo más seguro es que sea una "falsa contracción”. Sentir dolor en el bajo vientre es señal de que el bebé está muy encajado, no obstante, podrían faltar días para su llegada.

Romper fuente o romper aguas

Podrás saber que rompiste fuente o la bolsa del líquido amniótico cuando vayas al baño y notes que secretas un líquido parecido a la orina, pero más turbio y con algunos rasgos blanquecinos y que no puedes controlar como la orina. Generalmente, el líquido amniótico sale unas horas antes del parto, aunque algunas mujeres pueden romper la bolsa hasta el momento del parto.

Pérdida del tapón mucoso

La pérdida del tapón mucoso podría indicar que el trabajo de parto está por iniciar o que el día se acerca. Te darás cuenta que el tapón mucoso, el encargado de proteger el cuello uterino, se ha desprendido cuando vayas al baño y al limpiarte observes la presencia de una secreción marrón con rastros de sangre.

Dilatación del cuello uterino

Una señal verdadera de que el bebé nacerá pronto es la dilatación del cuello uterino, la cual sólo podrá ser detectada por el obstetra o la partera por medio del tacto vaginal. Estas contracciones se presentan en intervalos regulares y van disminuyendo la frecuencia entre una contracción y otra, volviéndose cada vez más dolorosas e intensas.

Si ya identificaste que estás en trabajo de parto, deberás considerar que si programaste una cesárea debes informar a tu médico mientras te desplazas al hospital. Y si optaste por parto natural, deberás relajarte y checar la frecuencia de las contracciones.

En resumen, el síntoma que te indicará que el parto ha comenzado son las contracciones derivadas por la dilatación del cuello uterino. El rompimiento de la fuente y la pérdida del tampón mucoso son señales que nos avisan que el embarazo está llegando a su fin y que el parto podría comenzar en algunas horas o incluso días. 

Eddie  Pabón Hematooncologo pediátra [email protected]